martes, 26 de agosto de 2008

José de Piérola

· Un cuento de este libro «En el vientre de la noche» recibió el importante Premio Internacional de Cuento Max Aub en 1998

José de Piérola
Sur y Norte (Norma, 2008)

· Ganador de importantes concursos literarios, José de Piérola se consolida como narrador con este conjunto de cuentos sobre la violencia y el exilio

Para el crítico Ricardo González Vigil, «José de Piérola es uno de los narradores más dotados de las letras actuales en español»

Largo ha sido el camino recorrido por José de Piérola (Lima, 1961) hasta alcanzar el reconocimiento literario con sus novelas Un beso de invierno (2000, Premio del Banco Central de Reserva) y especialmente El camino de regreso, una de las mejores novelas peruanas del 2007. Antes de ello, de Piérola se desempeñó como ingeniero civil y consultor de sistemas; recién en la segunda mitad de los años 90, tras radicarse en Estados Unidos, comenzó a figurar entre los finalistas de importantes concursos de narrativa. En 1998 ganó el Premio Internacional de Cuento Max Aub y en 2000 la XI Bienal de Cuento Premio Copé. Algunos de esos relatos, sumados a otros de más reciente factura, han sido reunidos por de Piérola en el libro Sur y Norte (Norma, 2008).Los cuentos que integran este libro están divididos en dos secciones: Sur, con relatos ambientados en el Perú en los años de la violencia política (1980-1992), y Norte, textos protagonizados por peruanos que, debido a ese problema, han tenido que emigrar a Estados Unidos. La violencia es uno de los temas dominantes y es abordada directamente desde el primer cuento, En el vientre de la noche: una patrulla del ejército lleva de prisionero a un senderista y uno de los soldados inicia una conversación con este prisionero (“indio ilustrado… con voz tranquila y modulada”) que se prolonga demasiado y se va haciendo cada vez más personal. El castigo al soldado por esa “falta” es matar él mismo al prisionero.Los enfrentamientos, por discrepancias éticas, entre los integrantes de las patrullas militares que operaban en la zona de conflicto son también tema central de los cuentos La viuda de Cayara y Mañana los buscamos. Este último, perteneciente a la sección Norte, es narrado por un ex soldado, asilado político en Estados Unidos. Son los mejores cuentos del libro y reúnen sus mayores virtudes: historias interesantes, de un realismo directo y honesto (a pesar de enfocar sólo un lado del problema), contadas con destreza técnica y un lenguaje eficaz. Pero también muestran algunas de sus debilidades, como la tendencia al efectismo o las recurrentes y exageradas apelaciones al universo afectivo de los personajes.

Estos elementos se vuelven dominantes en otro grupo de cuentos, historias de amor protagonizadas por artistas delicados e incomprendidos. En El futuro en la mirada (el cuento más extenso) el pintor Juan Delfín tiene en Gioconda a una misteriosa y agonizante musa; En Desearé Claudio le dice a su amada “Desiré, siempre te desearé, siempre te Desiré”;y en Extraño a Miles Davis, un hombre viejo y rudo se enamora de una joven y virtuosa violinista mientras escuchan discos de Davis. De Piérola no teme caer, en estos relatos, en lugares comunes y cursilerías: “Entonces esa callosidad firme que había construido con los años… empezó a pelarse capa a capa hasta dejarlo en carne viva frente a aquella mujer de palabras precisas como bisturíes” (pág. 71). Esa “callosidad” es una no muy acertada metáfora de las barreras psicológicas con las que nos protegemos de los demás.Entre los relatos aún no mencionados, habría que destacar a Nieve, la aventura de tres sudamericanos que tratan de entrar ilegalmente a Estados Unidos por la frontera mexicana. El protagonista, un peruano, narra esta historia en segunda persona, como si estuviera conversando con su amada ausente, a quien no volverá a ver. En general, de Piérola tiene la tendencia a atribuirle a sus protagonistas –hasta a los de la novela El camino de regreso–, algún amor platónico y sin futuro que los hace especialmente vulnerables y emotivos. Un mal hábito, pues mucho del valioso realismo de sus relatos se pierde en la artificiosa y edulcorada subjetividad de los personajes.No obstante estos reparos, los cuentos de Sur y Norte, escritos a lo largo de más de diez años, confirman que José de Piérola es un narrador en constante y notoria superación. Por eso hay grandes expectativas acerca de su próxima obra, con la que completaría una trilogía de novelas dedicadas a la violencia política de los años 1980-1992.
Javier Ágreda

LA PRIMERA. El diario que inspira respeto - Copyright Editora Las Rosas SAC All Rights Reserved
DOMINGO 6 DE JULIO DE 2008- SUPLEMENTO DOMINICAL

No hay comentarios: